La conquista del Petén fue la última etapa de la conquista de Guatemala y en lo general de Mesoamérica. El Petén es una amplia planicie de tierras bajas cubiertas de una densa selva tropical, e incluye una cuenca hidrográfica central con varios lagos y algunas zonas de sabana. La llanura está atravesada por una serie de colinas kársticas bajas, que se elevan hacia el sur al acercarse al altiplano de Guatemala. La conquista del Petén, una región ahora incorporada a la república de Guatemala, culminó en 1697 con la captura de Nojpetén (también conocido como Tayasal), la capital del reino itzá, por Martín de Urzúa y Arizmendi. Con el triunfo sobre los itzaes, los conquistadores europeos sometieron al último reducto maya independiente e invicto de Mesoamérica.
Antes de la conquista, el Petén contaba con una población considerable, conformada de diferentes pueblos mayas, en particular alrededor de los lagos centrales y a lo largo de los ríos. El Petén estaba dividido en diferentes señoríos mayas envueltos en una compleja red de alianzas y enemistades. Los grupos más importantes alrededor de los lagos centrales eran los itzaes, yalain y couohes. Otros grupos cuyos territorios se encontraban en el Petén eran los quejaches, acalas, choles del Lacandón, xocmós, chinamitas, icaichés y choles del Manché.
La Operación Windsor fue una ofensiva canadiense lanzada como parte de la Batalla de Normandía durante la Segunda Guerra Mundial. El ataque, que tuvo lugar en los días 4 y 5 de julio de 1944, fue realizado por la 3.ª División de Infantería Canadiense en un intento de capturar la ciudad normanda de Carpiquet y el adyacente aeródromo de las fuerzas alemanas. A pesar de que fue planeado originalmente para ser realizado durante las últimas etapas de la Operación Epsom, como un medio para proteger el frente oriental del asalto principal, fue pospuesto y lanzado a la semana siguiente.
Un dibujo de una joven con ropa corta o transparente es un elemento típico de las obras consideradas en las culturas occidentales como ecchi. Esta palabra ha sido adoptada por los fanes occidentales de los mangas y animes japoneses para describir obras con connotaciones sexuales suaves o lúdicas, a diferencia de la palabra hentai, que connota perversión o fetichismo. Las obras descritas como ecchi por los fanes occidentales no muestran relaciones sexuales o genitales, pero sí hacen referencia a temas sexuales.